Una persona tiene bienestar cuando se siente satisfecho con su salud física y mental, está feliz y tranquilo emocionalmente con su vida personal, trabajo y entorno que lo rodea; por eso, tener salud te permite desempeñarte efectivamente en los distintos roles que realizas. Además, las causas de muchas enfermedades no solo son producto de factores externos, en muchas ocasiones son provocadas por las rutinas, hábitos o higiene que tienes en tu día a día.
Sabemos que quieres cuidar de tu bienestar y el de tu familia, a continuación, te compartimos las principales prácticas que expertos recomiendan:
Cuida tu alimentación:
Una buena alimentación te permite aumentar tus defensas, estar sano y sentirte bien, considera:
- Comer equilibradamente, eligiendo alimentos variados y reduciendo las porciones; recuerda que los excesos no son buenos.
- Mantener una rutina e intentar comer siempre a las mismas horas; a pesar de tu ritmo de vida y de lo complicado que pueda ser, saltarte una comida puede provocarte mareos y dolores de cabeza.
- Beber abundante agua, esto te permitirá estar hidratado, eliminar toxinas, ayudar a tu digestión y evitar el estreñimiento.
Si buscas mejorar tu peso a través de la alimentación, lo ideal es que visites a un médico especialista que te guíe en el proceso, y para ello es fundamental que cuentes con un servicio de medicina prepagada seguro.
Practica el deporte que más te guste:
Los expertos recomiendan que practiques diariamente actividad física, puedes empezar caminando por 30 minutos. El deporte te ayuda a mejorar la calidad del sueño, mantenerte en tu peso, ayuda a tu salud mental y física, reduce el riesgo de actividades coronarias, entre otras.
Para realizar ejercicios de forma segura en casa o en exteriores, debes considerar:
- A la hora de realizar ejercicios de fuerza o estiramiento, debes proteger tus articulaciones, utilizando una colchoneta deportiva o MAT.
- Limpia el espacio donde realizarás ejercicio, esto te ayudará a evitar el riesgo de resbalarte o tropezarte con algún objeto.
- Utiliza un calzado adecuado, hacer ejercicio en medias o calcetines aumenta el riesgo de resbalones o caídas.
- Tómate el tiempo de calentar antes de empezar tu rutina de ejercicio. El calentamiento le dirá a tu cuerpo que es hora de ejercitarse.
- Busca lugares abiertos donde no existan aglomeraciones.
La salud mental es importante:
La salud mental y la salud física están vinculadas, cuando una falla afecta a la otra. Cuídate del estrés, este puede afectar tu sistema inmunitario, sistema nervioso, cardiovascular, peso, entre otras. Cuando estás bajo mucho estrés sientes ansiedad, distracción, preocupación, nerviosismo, cansancio excesivo, depresión, dolor en el pecho, palpitaciones rápidas, mareos, dificultad para respirar, entre otras. En estos casos, es mejor que puedas visitar a un médico a través de tu servicio de medicina prepagada.
Además, en situaciones de estrés puedes considerar estos ejercicios de relajación recomendados por Harvard Medical School
- Realiza ejercicios de respiración, inhala lentamente y mantén la respiración unos segundos, exhala lentamente pensando o repitiendo mentalmente la palabra “relájate”. Puedes repetir este ejercicio entre 5 y 10 veces.
- Escoge una palabra o sílaba y repítela en silencio o en voz alta. No importa el significado de la palabra, lo importante es la repetición.
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Disfruta de un tiempo de calidad:
Pasar tiempo en familia, promueve tu bienestar y el de ellos, además logras mejorar la comunicación en el entorno familiar, fortalecer sus vínculos afectivos y aumentar la felicidad en el hogar. Toma en cuenta:
- Crea un calendario de tiempo en familia donde agenden actividades recreativas y divertidas que realizarán, esto ayudará a que todos los miembros de la familia se organicen y participen en las actividades.
- Si es complicado comer juntos a diario, pueden disfrutar de una o dos cenas en familia semanalmente.